Abril fue tan desastroso que nunca imaginé que llegarÃa a Mayo, nunca imaginé desandar el camino recorrido. Me perdà y pensé que nunca volverÃa a encontrarme, pero todavÃa hay cosas que aún desconozco de mi, buenas y malas; por supuesto que me molestó encontrarme con las malas porque sentÃa que no tenÃa el poder de cambiarlas y que sólo era una espectadora viendo mi vida pasar. En cambio las buenas siguen siendo una revelación.
Este mes me confirmó todo lo que no quiero ser y quizá me viste tan perdida que al final decidiste traerme un regalo, una segunda oportunidad, quizá no estaba preparada pero lo acepte, con miedos e inseguridades, pero lista para la siguiente aventura.